LA ESCRITURA PÚBLICA DE COPROPIEDAD

La posibilidad de escriturar una copropiedad de terrenos en Argentina es completamente legal y puede ser una excelente solución a la hora de compra. La clave está en conocer las reglas, anticipar escenarios posibles y dejar todo bien documentado.

Tener un terreno en escritura conjunta de propiedad puede abrir muchas oportunidades si se gestiona de forma adecuada. Como en cualquier decisión patrimonial, informarse y asesorarse correctamente hace toda la diferencia.

La copropiedad de terrenos en Argentina es una modalidad cada vez más utilizada, tanto por familias como por socios o parejas que desean adquirir un inmueble de forma conjunta. Este sistema permite que dos o más personas compartan la titularidad de un terreno, ya sea en partes iguales o definidas en porcentajes,  según el acuerdo entre los copropietarios.

Es muy importante que los cotitulares dominiales tengan “ afectio societatis” es decir la voluntad de asociarse en beneficio común y tener una convivencia armoniosa.

Sin embargo, no se trata solo de poner los nombres en una escritura: la copropiedad implica derechos, obligaciones y decisiones compartidas que pueden influir en la venta, el uso del terreno o incluso su subdivisión. Por eso, entender cómo funciona este régimen legal es clave para evitar conflictos y proteger tu inversión.

¿Qué implica compartir la titularidad de un terreno? ¿Qué es la copropiedad y cómo funciona?

La copropiedad de terrenos en nuestro país establece que dos o más personas son titulares de un inmueble. Esto no significa que el terreno esté dividido físicamente entre ellas, sino que cada una posee un porcentaje ideal del todo. Se establece por pacto y como anexo en el acto de escrituración, el área de uso exclusivo propio de cada copropietario donde podrá construir e introducir mejoras a su costo.

Diferencias entre copropiedad y condominio

Aunque suelen usarse como sinónimos, hay una distinción entre copropiedad de inmuebles y condominios. En el lenguaje jurídico, la copropiedad se refiere al régimen general de propiedad compartida, mientras que el condominio se aplica a casos específicos como los edificios o complejos con espacios comunes.

Derechos y responsabilidades de los copropietarios

Dentro de este régimen, los copropietarios deben tomar decisiones conjuntas respecto al uso, mejora o venta del terreno. Este tipo de escritura de propiedad compartida se suele utilizar cuando dos o más  personas invierten juntas

Cada titular tiene derecho a disfrutar del bien y a beneficiarse de su renta o valorización. Pero también tiene obligaciones, como contribuir con los gastos, pagar los impuestos asociados a la propiedad compartida y respetar los acuerdos establecidos en un acuerdo privado entre los cotitulares dominiales o también denominado reglamento de convivencia interno con reglas claras.

Rol del escribano en el proceso

El escribano es clave para garantizar la legalidad de la operación. Se encarga de verificar la validez de los documentos, redactar la escritura y realizar el registro de la propiedad. Una vez firmada la escritura, se inscribe en el Registro de la Propiedad Inmueble.

¿Qué sucede si uno de los copropietarios desea vender su parte?

La ley otorga a los copropietarios el llamado “derecho de preferencia”, lo que significa que si uno quiere vender su parte, debe ofrecerla primero a otros copropietarios y luego a terceros ajenos.

Consideraciones fiscales y legales en la copropiedad

Los cotitulares deberán compartir los gastos  en forma proporcional a su porcentaje en la escritura. Esto aplica tanto para impuestos, mejoras acordados (ej ; camino interno, perforación de agua, cisterna,  impuesto de Rentas, bajada de electricidad, etc )

Alternativas en caso de desacuerdo entre las partes

En situaciones de conflicto, es posible iniciar una acción de partición para vender el inmueble y dividir el dinero. Por eso, antes de llegar a ese punto, conviene contar con acuerdos privados que regulen la copropiedad de un terreno

Consecuencias legales de incumplimientos

Si uno de los copropietarios incumple con sus obligaciones, el otro puede accionar legalmente para exigir el cumplimiento o, en casos graves, solicitar la venta del bien. La mediación extrajudicial  es una vía eficaz para resolver diferencias y permite llegar a acuerdos sin ir a juicio. Cuando la mediación falla, la única salida suele ser la justicia. Se puede pedir la división del bien, forzar su venta y dividir el producto. Esto es común en casos donde la relación se ha deteriorado o hay falta total de comunicación.