Un reglamento de convivencia interno para una parcela de copropietarios
establece las normas que rigen la vida en común, asegurando una convivencia
armoniosa y respetuosa entre todos los vecinos.
Este reglamento aborda aspectos como el uso de espacios comunes,
horarios de ruido, cuidado de áreas verdes, manejo de residuos y normas para
reuniones, entre otros.
Detallar claramente qué áreas son de uso común (jardines, piscina, salón de usos múltiples, etc.) y establecer normas para su uso, horarios y responsabilidades de mantenimiento.
Control de ruidos:
Establecer horarios y límites para actividades que generen ruido, como
música, fiestas, o uso de herramientas.
Manejo de residuos:
Especificar cómo se deben seleccionar, depositar y sacar la basura,
evitando malos olores y contaminación.
Uso de áreas verdes:
Normas para el cuidado de jardines, patios y otros espacios verdes,
incluyendo la prohibición de realizar quemas o arrojar residuos.
Normas para mascotas:
Establecer requisitos para la tenencia de mascotas, como el uso de
correa, la limpieza de sus desechos, y la prohibición de ingreso a ciertas
áreas.
Uso de estacionamientos:
Definir reglas para el uso de estacionamientos, asignación de plazas y
espacio de estacionamiento de cortesía para invitados.
Visitas:
Regular el ingreso de visitas, horarios permitidos y responsabilidades
de los residentes por sus invitados.
Mantenimiento y reparaciones:
Establecer procedimientos para la solicitud de presupuestos de
reparaciones en áreas comunes y la coordinación de las mismas.
Servicios e impuestos
Servicios de electricidad y agua ; costo de instalación inicial y pago
del proporcional por consumo de medidores internos. Pago de impuestos
inmobiliario rural proporcional.
Normas para reuniones y eventos:
Definir horarios, permisos necesarios y responsabilidades para la
realización de reuniones o eventos en áreas comunes.
Sanciones por incumplimiento:
Establecer sanciones claras y proporcionadas para las infracciones al
reglamento, con el objetivo de garantizar su cumplimiento.
Procedimiento para modificaciones:
Indicar cómo se pueden realizar modificaciones al reglamento en el
futuro, estableciendo los mecanismos de votación y aprobación.
El reglamento debe ser elaborado considerando las características
específicas de la parcela, como el número de viviendas, la existencia de áreas
comunes, y las necesidades de los copropietarios.
Participación y compromiso de los copropietarios:
Es fundamental que el reglamento sea elaborado con la participación de
todos los copropietarios, para asegurar que refleje sus necesidades y
expectativas.
Este reglamento es de cumplimiento obligatorio y ningún copropietario
puede alegar desconocimiento al incumplir alguna norma establecida.